Suspendida la Lucha Canaria
Las federaciones insulares se han puesto de acuerdo para finalizar la temporada
La Federación Regional de Lucha Canaria anunció anoche oficialmente la suspensión, hasta nuevo aviso, de todas las competiciones pendientes por la crisis del coronavirus. La medida, consensuada con cada una de las federaciones insulares, afectará al tramo del calendario que restaba por disputar de la Liga Regional, así como a las diferentes copas que estaban pendientes de resolución y abarcará todas categorías, desde la sénior hasta las de base.
Hacía ya unas semanas que los dirigentes abogaban por evitar cualquier tipo de riesgo sanitario con competidores, mandadores y aficionados, en consonancia con el resto de modalidades deportivas, pero la decisión se ha demorado en ponerse en conocimiento público hasta finales de este mes, lo que ha provocado cierto desconcierto en los clubes, que ansiaban noticias al respecto desde que fueran suspendidas las luchadas a mitad de marzo, coincidiendo, ya, con el confinamiento obligatorio.
El hecho de este desenlace fuese previsible, dadas las restricciones actuales y las que se anuncian en torno a eventos y espectáculos que impliquen contacto físico y aglomeraciones de gente, no deja de causar una enorme incertidumbre al deporte vernáculo, dadas sus señas características.
Lo que sí se mantiene en pie es el proceso electoral, que arrancará en mayo y por el que se elegirá a las juntas tanto de la Regional como de las federaciones insulares. Hay confianza en que, en los próximos dos meses, se produzcan los avances necesarios en la lucha contra la pandemia que, con las precauciones pertinentes, permita ir a las urnas. Aunque los Juegos de Tokio se han trasladado a 2021, se mantendrá la tradición de fijar los comicios en año olímpico y, además, se considera especialmente la coyuntura actual, que obligará a los regidores entrantes a extremar el ingenio al encontrarse un panorama sin precedentes y que pone en riesgo la continuidad de proyectos y calendarios. A ellos corresponderá guiar la lucha canaria en el desafío que ahora se le abre y que, de momento, no vislumbra soluciones a corto plazo, si bien es una problemática sobrevenida y que responde a causas de excepcionalidad.
En este sentido, todo queda pendiente de las resoluciones de las autoridades políticas y sanitarias aunque, explorando el desarrollo de los acontecimientos en otras disciplinas en España, donde no se aguardan soluciones inmediatas, la previsión es que los terreros tardarán en recuperar el pulso.