El Rallye Isla de Gran Canaria preparado para seguir sumando ediciones
Este año se disputa la edición número 60º, con una lista de inscritos ya cerrada de 107 equipos
Esta última semana del mes de mayo se cumple una de las efemérides más importantes del automovilismo canario y español, con la celebración el próximo viernes y sábado de la 60º edición del Rally Isla de Gran Canaria (1954-2021), un evento que realmente ya tiene 67 años de edad en su largo periplo desde los cimientos de este deporte hasta la actualidad.
El Isla de Gran Canaria es el rallye que ha marcado la pauta al figurar en todas las etapas vividas por el automovilismo en Canarias y en España durante casi siete décadas, representando en sí mismo la historia de los rallys y su evolución en todo este tiempo. Un largo camino recorrido con la inestimable colaboración y apoyo del Cabildo Insular y de los ayuntamientos donde se desarrolla la prueba, como es el caso de Las Palmas de Gran Canaria, que ha sido siempre sede de la salida del rallye. Y en los últimos años, la Vega de San Mateo, que junto a los municipios de Valsequillo y Tejeda integran el rutómetro.
Con la lista de inscritos ya cerrada con 107 equipos desde hace varias semanas -se agotaron las solicitudes en menos de tres días-, la organización de la Escudería Maspalomas prepara ahora una presentación de la prueba muy especial para celebrar estas sesenta ediciones. Será este miércoles 26 de mayo, a partir de las 11 horas, en la planta 0 del Estadio de Gran Canaria, donde se realizará una semblanza a la historia de nuestro rallye.
Siete décadas de historia
El Rallye Isla de Gran Canaria disputa este año su edición número 60º, aunque en realidad cumple 67 años de historia de nuestro automovilismo, ya que no se pudo celebrar en siete ocasiones, cinco de ellas debido al fatídico accidente del circuito urbano de Escaleritas en 1967, que obligó a suspender todas las competiciones de la época hasta 1972, año en el que regresaba el automovilismo tal cual como lo conocemos hoy en día.
Con la creación del Real Automóvil Club de Gran Canaria en 1954 se organiza la primera edición y la Escudería Maspalomas lleva ya 30 años a cargo de la organización del decano de los rallys en Canarias y en España, sin cambiar nunca de nombre y llevando siempre la denominación de esta isla, incluso en las ediciones que gozó de categoría internacional o fue puntuable para la Copa de España.
Recordamos ahora que es de los pocos rallys que incluso tienen un libro que narra su historia, editado en 2004 con motivo de su 50º aniversario y que este año será recordado con una nueva publicación.
En el complicado 2020, el Rallye Isla de Gran Canaria no se perdió y fue el tercer evento del automovilismo en Canarias después de la finalización del primer estado de alarma por la pandemia del coronavirus.
La isla de Gran Canaria lideró la vuelta a la nueva normalidad en el deporte y en el automovilismo deportivo, lo que es un buen indicador para afrontar con mucha ilusión esta edición tan especial.
Sin olvidarnos de todas las precauciones
Sin olvidarnos de continuar con la implicación de todos en la organización, con el objetivo de ofrecer un gran rallye y además seguro para todos si cumplimos los protocolos de seguridad y la normativa a seguir para evitar los contagios del Covid-19, que sigue acechando.
Tenemos la suerte de practicar un deporte al aire libre, pero no debemos nunca descuidar todas las precauciones y por eso se insiste tanto en el uso de la mascarilla en todos los casos y evitar las aglomeraciones de aficionados.
Por eso y apostando por el sentido común y el buen comportamiento de los aficionados, se sigue apostando por el tramo cronometrado en la capital de Las Palmas de Gran Canaria, entre San Lorenzo y el Jardín Canario, que acerca todavía más este deporte al público ansioso por ver este gran espectáculo del motor. Y llevar luego el rallye a las zonas de cumbre y medianías, con sede en la Vega de San Mateo y buena parte del recorrido por Valsequillo y algo también en Tejeda.
Solamente cabe esperar un ejemplar comportamiento de los aficionados cumpliendo con las medidas básicas de seguridad personal en los rallys y el seguimiento total de la normativa anti-covid.